Ahora puedes. Una de las ventajas del confinamiento es que las empresas, las compañías y, especialmente, sus responsables se enfrentan a una situación insólita que les empujará a tomar decisiones inusuales. ¡No desaproveches la ocasión de hacer branding!
La mayoría de marcas en situación normal (en un mundo sin pandemias, me refiero) se enfrenta a dos problemas: 1) el frenético ritmo cotidiano les deja poco tiempo para la reflexión; y 2) en un mercado estable se toman decisiones cómodas. Pues bien, ya lo sabes, no hay confort en trabajar desde casa, con conciliación familiar hardcore, poco tiempo para el ocio (a menos que dispongas de perro o preadolescentes) y la presión de decidir si cierras o te reinventas. Ha llegado el tiempo de los valientes. Tienes que hacer marca.
Y yo que nunca pensé que…
Exacto. ¡Cuántas cosas estás aprendiendo! Que el teletrabajo incluso aumenta la productividad de tu empresa, que ahora las reuniones son más ágiles (¡y puntuales!), que la sana competencia te empuja a mejorar, que cuando no tienes alternativa buscas salidas creativas que funcionen, que salir de la zona de seguridad da réditos, que la solidaridad es un motor tan potente como la competitividad, que la digitalización no era una moda, que la comunicación corporativa es esencial para tener visibilidad en el mercado, etcétera, etcétera, etcétera.
Si tu marca, tu empresa, tu servicio está viviendo todo esto, ya estás preparado para el siguiente paso. Coordinar todas estas impresiones bajo una estrategia común, coherente, sólida y atractiva (de “atraer”). 1, 2, 3, branding.
Unificar
Otra cosa que has aprendido con el confinamiento es a darle cuatro vueltas a las cosas y pasar de las mecánicas y sistemas habituales. ¡Alégrate! Estás in the mood para empezar a renovar tu marca. Empieza por los valores.
Esta crisis sanitaria está ayudando a muchas empresas a darse cuenta de en qué son buenos, qué les diferencia, qué les hace especiales, qué pueden ofrecer que los demás no; cuáles son sus atributos, en definitiva. Eso son valores de marca. Anótalos. Cuando vayas a la agencia de turno para contratar un proceso de rebranding (no sé, por ejemplo a una que te da buenas vibraciones porque se llama Vibranding) te lo agradecerán.
La cultura de empresa es otro de los elementos clave que definen una marca. ¿Cómo se relacionan tus empleados? ¿Tu compañía es vertical u horizontal? Cuando hay que arrimar el hombro (cuando el mundo se vuelve del revés y hace falta ir todos a una), ¿qué respuesta obtienes? ¿Hay compromiso o solo responsabilidad? A eso lo llamamos employee branding. Y si no lo has trabajado, deberías pensar en hacerlo. Y no necesariamente cuando dobleguemos al virus. Cuanto antes, mejor.
De puertas afuera, ya te estás dando cuenta de la importancia de las redes sociales, las herramientas digitales, las apps y, especialmente, del poder que tiene tu web. Incluso has empezado a mirar al departamento informático (si lo tienes) como algo más que un grupo de nerds coleccionistas de memorabilia de cómics y Star Wars. Ahora son tus mejores aliados. Júntalos con tu departamento de marketing e id juntos a la agencia de comunicación de confianza a encargar una estrategia digital efectiva, creativa y diferencial. Si solo con ponerte un poco las pilas en este campo ya estás notando el retorno, ¡imagina cuando además lo hagas con acciones, campañas y contenidos campeones!
Finalmente (y esto es de puertas afuera y de puertas adentro), ya es incontestable la evidencia de que todo entra por los ojos, no solo la comida. Ahora que nos vemos, nos comunicamos y hacemos negocio a través de pantallas entiendes la importancia de la jerarquía de contenidos, la harmonía visual, el diseño útil y el poder de lo gráfico. Que bien hecho es mejor que cutre, en definitiva. Pues aprovecha para que todo esto cuelgue con coherencia de una identidad visual corporativa potente, congruente y alineada con tus objetivos de marca.
Cuando volvamos a vernos ahí fuera, los que hayan aprovechado el tiempo para engrasar su marca despegarán como un cohete. To boldly go where no brand has gone before.